"Pues yo no me veo", "a ti te queda muy bien pero yo me veo rara"... A ver, ¿cuantas de nosotras no ha dicho ésto alguna vez en su vida? Pero no sólo con los tocados, ¡con todo que sea distinto y que no llevemos habitualmente! Claro que no nos vemos, para muchas es algo nuevo, y para todas ha habido una primera vez y...¡cuidado que enganchan!
Una vez nos decidimos a ponernos un tocado, lo primero que pensamos es: que sea pequeño. Lo entiendo, porque el primer tocado que llevé fue pequeño (bueno, más grande de los 2 cm que pensaba en un principio, pero sí, fue discreto y no muy grande).
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| Rita Hayworth |
Al principio, tooooooooooooooooooooodos son grandes (5 centímetros: grande, 3 cm: aún es grande, 1 micra: es menos grande pero todavía se ve demasiado, ¿cierto o no?) y luego queremos más y más y más y... ¡no hay límites! El límite lo pones tú, porque para gustos, los colores.
Una de las cosas que me hizo plantearme el llevar tocado fue que yo suelo vestir de manera bastante sencilla, no suelo llevar muchas florituras, ni volantes, ni vestidos largos...y a veces el look se queda un poco pobre, por eso me decidí, ¡y fue todo un acierto! Es el complemento perfecto, cambia el estilismo totalmente.
Los tocados son muy versátiles,
los podemos usar a cualquier hora del día ( a diferencia de las pamelas o sombreros que sólo se pueden lucir en bodas que se celebren por la mañana o a media tarde, ya que en su origen servían para protegerse del sol).
Su tamaño dependerá también de ésto: más grande por el día y más pequeños por la noche. Recordad, el tamaño del complemento disminuye conforme avancen las horas.
Si seguimos el protocolo,
el tocado hay que llevarlo puesto todo el tiempo, no se debe quitar en ningún momento. Por ello, es imprescindible que sea cómodo y que te sientas a gusto con él, pues serán muchas las horas que tendréis que llevarlo.
Con respecto a llevarlo con vestido largo o corto es muy sencillo: si el vestido es largo es recomendable llevar un tocado pequeño (para no robarle protagonismo), y, si es corto, os permitirá llevar un tocado más voluminoso.
¿Cuál nos favorece más? Un tocado grande puede compensar una figura generosa en curvas, mientras que uno más pequeño aportará sofisticación a una figura alta y espigada sin sumarle centímetros.
¿Elijo un tocado espectacular o uno discreto? Ante todo, elige uno que vaya con tu estilo. Podemos, y debemos, ser originales, y de vez en cuando atrevidas ¿por qué no?Es fundamental centrarse en una sola zona y destacarla. Si quieres lucir un tocado espectacular, lo mejor será que el vestido, los zapatos y demás complementos sigan una línea suave y sencilla, sin demasiados adornos. El complemento siempre debe ser una prolongación del vestido, el maquillaje y el peinado, todo en su conjunto debe conectar. Menos es más.
El tocado no tiene porqué ir igual que los zapatos y el bolso, ni siquiera se lleva ya igual los zapatos y el bolso. Tiene que ir todo en armonía. Prueba a romper la gama cromática del conjunto, y apuesta por un tocado de color distinto al del vestido, el resultado será mucho más chic y sofisticado.
¿Tocado a la derecha o tocado a la izquierda? Pues el protocolo dice que en la parte derecha, por una sencilla razón: la mujer da su brazo izquierdo al acompañante y así no molesta. Pero chicas, realmente se puede llevar donde queráis, donde os lo veáis mejor y estéis más favorecidas. A veces las reglas están para romperlas...
Y no sólo en bodas, bautizos y comuniones, una cita especial, una noche cualquiera.... haz que sea parte de tu look. Hay tocados para todos los momentos.
Bueno ladies, espero que os sirva y que os animéis!
Muaaaaaaaaaa
